Nuestro objetivo es hablar con más de 1000 alumnos y maestros a lo largo de las 5000 millas de ruta de nuestro proyecto, y contarles sobre nuestra expedición y su razón de ser:
“correr por las tierras vírgenes de Sudamérica y su vida salvaje”.
Hacemos nuestra presentación en español –lo mejor que podemos–, estamos aprendiendo todo el tiempo; los grupos han sido excelentes, y al combinar nuestras presentaciones en powerpoint con la buena voluntad de alumnos y maestros, logramos que todos puedan aprovechar las sesiones.
Uno de los temas clave es “los servicios que nos ofrecen los ecosistemas”, un concepto nuevo en el campo de la conservación, que busca resaltar la necesidad del mundo natural y sus beneficios. La lista de servicios de los ecosistemas es infinita, en la que se encuentran: descomposición, polinización, oxígeno, agua limpia, control de alimentación, control natural de pestes, alimentos…
También conversamos sobre las amenazas al medioambiente que vemos mientras corremos: especies introducidas, basura (estamos haciendo un sondeo de basura diario), los criaderos de salmón y de moluscos, la deforestación, el pastoreo excesivo y las acciones que cada uno de nosotros podemos realizar para minimizar su impacto.
Hasta ahora hemos hablado con chicos de 8 a 17 años, y generalmente nos hemos encontrado con chicos que saben mucho sobre el medioambiente y la vida salvaje de Sudamérica. Nuestras sesiones son interactivas, dividimos las clases en grupos, hacemos competencias de preguntas y respuestas y un concurso de identificación de aves y mamíferos de la región.
Los colegios que hemos visitado hasta ahora son, el Colegio de Puerto Natales; Colegio de Hernán Medino Correa, Cochrane; Colegio de Hamburgo, Puyhuapi y la semana pasada, el Colegio Faquen Montessori, Puerto Montt y también en Uruguay el colegio St. George. Los maestros y directores se sumaron a nuestras sesiones, lo cual es fantástico; y los niveles de energía y participación han sido altísimos. Gracias a todos por habernos invitado a sus escuelas, lo disfrutamos muchísimo.
También hemos visitado la escuela primaria de Valle Chacabuco, a la que asiste un grupo pequeño y encantador de chicos, cuyos padres trabajan en Conservación Patagónica, la obra de beneficencia para la cual estamos recaudando fondos. Conservación Patagónica realiza una labor increíble en los prados dañados para restaurar la vida salvaje del sur de Chile.
Trataremos de conectarnos con estas escuelas otra vez, desde algún otro lugar de nuestro recorrido, vía satélite, con el objetivo de compartir con ellos la vida salvaje, los paisajes y las personas que encontramos a nuestro paso; y por supuesto también contestar las preguntas que nos hagan.
Nos encantará recibir los mensajes de cualquier maestro o padre que quiera conectar la escuela de sus chicos con nosotros en tiempo real. Solo tiene que hacer clic en este enlace para enterarse de lo que ofrecemos en nuestro Big Toe Classroom, y de cómo conectarse con nosotros.